26 de abril de 1986. Prípiat. Mientras los 40.000 habitantes de la ciudad dormían, a pocos km de allí estallaba el reactor nº4 de la central nuclear de Chernobil. Las autoridades soviéticas, al mando de Mijail Gorbachov, aseguraron a la población que podían continuar con sus vidas. Incluso las escuelas abrieron sus puertas y recibieron a los niños de forma habitual. 36 horas después del accidente la ciudad había sido evacuada y estaba desierta. 30 años más tarde sigue siendo zona de exclusión.
El mal de Aral es la víctima de un insensato sistema de planificación que sacrificó los huertos y frutales, mimados durante siglos, al monocultivo del arroz y del algodón; de un sistema que potenció el regadío de miles y miles de hectáreas a toda costa y que no vaciló en usar toneladas de abonos y pesticidas para conseguir una mayor productividad. La lógica del sistema le quitó el agua al Aral para devolverle unos residuos envenenados. La lógica del sistema anegó los campos e hizo emerger la sal de las entrañas de la tierra. El sistema se cargó el Mar de Aral
La ingeniosa mente de Stig Lundbäck, cardiólogo de profesión e inventor de vocación, supo fusionar sus dos mejores aptitudes en lo que resulta un creativo sistema de generación de energía renovable. La técnica utilizada saca el mejor partido del potencial que ya ofrece la energía de las olas. Hablaremos de la recuperación de esta energía, y su transformación a electricidad. Así, como si de un corazón artificial se tratara, los latidos del mar son visibles ahora gracias a la energía undimotriz.
– Me decoloro – le dijo la barrera de coral al manglar mirándole con ojitos tristes.
– No digas eso, no me gusta verte así. – El manglar sabía que era cierto, pero no encontraba palabras de consuelo para su princesa.
– Tú eres el que mejor me conoce. Sabes que mis colores espectaculares, esos por los que todos me admiran, en realidad no son míos. No tengo control sobre ellos, no puedo hacer nada para mantenerlos.
– Eso no es verdad. – mintió el manglar sabiendo que el único que podía frenar el blanqueamiento del coral era el Hombre, esa misma especie responsable de la contaminación y del cambio climático. Sus vidas estaban en sus manos y el manglar no tenía muchas esperanzas.
El día 21 de marzo, coincidiendo con una florida efeméride se celebra desde 2013, el día internacional de los bosques.
Los bosques son los ecosistemas más completos que existen, en ellos, se alberga gran cantidad de vida animal y vegetal. A nivel humano, también son muchos los recursos que ofrece, como la energía o la gestión de la madera.
Estas fechas pretenden concienciar sobre la importancia en el mantenimiento de las grandes masas forestales, pues depende de estos microclimas el equilibrio a nivel mundial entre el oxígeno y los niveles de dióxido de carbono.
Hay una imagen proyectada en nuestro cielo, capaz de superar los efectos especiales más impresionantes del cine. Creo que no habría una sola persona en el mundo que no quisiera verlas en directo por lo menos una sola vez. Existen incluso historias que recuerdan a las que en oriente refieren a serpientes o dragones en el cielo. Ciencia y mitología rodean a las auroras boreales.
Según la Wikipedia, una mancha es una zona de decoloración o de un color diferente que generalmente se distingue fácilmente del resto de la superficie, material o medio sobre la que se encuentra. Su distribución suele no ser uniforme, y en la mayoría de los casos se genera accidentalmente. Lamparón la llama mi madre también. Contra la mancha, el detergente. Pero…¿Cuales son las armas que utiliza el detergente para librarnos de los lamparones? ¿Podrían esas armas, además, restaurar nuestra fama de guarros, si la hubiera? Decía el químico alemán Justus von Liebig que la cantidad de jabón consumida por una nación era el mejor indicador de su grado de civilidad.
Geofísica, atleta, escucha música heavy, tiene un peluche favorito, y es una científica de las más contemporáneas. Recibió el premio Extraordinario del Doctorado en el área de ciencias. Instituciones como el Observatorio de la Armada y el Instituto Andaluz de Ciencias de la Tierra han contado entre sus filas con la joven investigadora. El hielo, el mar, y desde hace poco, otros mundos, complementan afición y pasión por el estudio geofísico del planeta. Las redes y su gran aportación a las ciencias de la tierra han permitido conectarnos de nuevo para que hoy, sea la protagonista de este espacio.
Las estrellas existen desde que el mundo es mundo. Hombre, mujeres y niños han contemplado su belleza y ellas han ofrecido generosamente su luz a cualquiera que haya querido observarla. Sin embargo, tal generosidad no se ha visto reflejada en la ciencia que las estudia. La astrofísica ha sido hasta hace poco un mundo creado por y para hombres experimentados. Ser mujer, joven y analizar lo que viene del cielo ha sido considerado solo una extravagancia. Y si no, que se lo digan a Jocelyn Bell.
Si a la inmensa bañera que forman los océanos del planeta le quitáramos el tapón que aguanta toda el agua, y esta se fuera por un hipotético sumidero… nos ofrecería una geografía oculta a la vista, pero que las numerosas cartografías sobre el relieve del fondo marino la hacen realidad. Mapas y cartografías que tuvieron su precedente en uno, Marie Tharp, graduada en música, geóloga y matemática fue la autora principal de la primera cartografía del suelo oceánico.